COMUNICADO DE CNT PALENCIA SOBRE EL ARTÍCULO EN "EL PAÍS" SOBRE RAFAEL
BARRIENTOS
Desde CNT Palencia nos parece vergonzoso que se reconozca la labor
empresarial de un hombre que ha basado parte de sus beneficios en los
menores costes que suponen los presos y discapacitados, y que si no está
fabricando en China para poder poner su producto en cualquier lugar del
mundo con los costes chinos es, porque no puede, no le dejan o no lo ha
conseguido, como él mismo reconoce.
Vergonzoso que se ensalce la esclavitud llamada "globalización" para el
triunfo empresarial y su subida de acciones en bolsa, vergonzoso que los
presos y discapacitados cobren menos.
Así mismo notamos que se elogia el papel de la banca para poder
prosperar, se destaca la necesidad de crédito y se señala que si esa
necesidad no se satisface supone un obstáculo para las empresas, cuando
sabemos que la banca lo único que hace es estafar y crear esclavitud.
¡Por todo ello, hacemos un llamamiento al boicot de los productos de
Rafael Barrientos como son aquellos provenientes de Trofeos Pallart
S.L., Regalos Rafael (RRFactory) y RRHome!
http://elpais.com/m/economia/2015/01/02/actualidad/1420201096_983856.html
Rafael Barrientos convierte a Pallart en el fabricante líder de trofeos
deportivos
Pepe Varela 2 ENE 2015 - 13:18 CET
Rafael Barrientos, junto a los trofeos que fabrica en Palencia.
En el año 1975, Rafael Barrientos, presidente y fundador de Pallart, era
comercial en una óptica y una tienda de regalos y lámparas en Palencia.
Diez años después, ya era el mayor fabricante español de trofeos
deportivos. Las instalaciones de la compañía están situadas justo en el
límite urbano palentino. El emprendedor confiesa que lo que ha lle-vado
al éxito empresarial en un tiempo relativamente breve es una combinación
de varios factores: visión de futuro, mente analítica y una capacidad
innata para desarrollar ideas de negocio que le diferencien claramente
de la competencia.
"Por ejemplo", detalla, "cuando yo empecé en esto de los trofeos, todo
se trabajaba de un modo casi artesanal. Yo mismo lo hacía así. Sin
embargo, al poco tiempo, me di cuen-ta de que el único modo de progresar
estaba en aplicar, a la fabricación de trofeos, plan-teamientos y
técnicas industriales. Hoy seguimos funcionando así".
Con la innovación como bandera, en 1983, Trofeos Pallantia —así se
llamaba entonces la compañía— entra en contacto con la empresa catalana
Troc-Art. Ambas firmas deciden sumar fuerzas. Una unión que no tardó en
consolidarse con un nuevo nombre: Pallart.
Barrientos tiene claro que, en los negocios, tan sólo se consigue
triunfar ofreciendo al mercado lo que necesita en cada momento. "Un
empresario debe ser como un jugador de ajedrez: tiene que ver una jugada
por delante de la competencia", describe. Así es como desde un local de
100 metros cuadrados, desde el que Rafael comienza a distribuir a nivel
nacional los trofeos que él mismo diseña y elabora, pasa a unas
instalaciones de 10.000 metros cuadrados y a estar presente en destinos
tan lejanos cómo Argentina.
"Quizás mi propio desconocimiento del inglés nos haya impedido
convertirnos en núme-ro uno a nivel mundial en nuestro campo. Sin
embargo, exportamos una buena parte de la producción, en concreto un
33%, y, ahora mismo estamos trabajando mucho la perso-nalización del
trofeo principalmente para crecer en el mercado europeo. En Estados
Unidos es algo que está muy extendido, pero en Europa, si conseguimos
triunfar, sere-mos prácticamente los únicos", explica.
El obstáculo para que Pallart pueda lograr los objetivos que se ha
marcado es el mismo al que se enfrentan muchas empresas españolas: el
acceso al crédito. "Para desarrollar tus planes de negocio tienes que
tener financiación. Al no haberla, estás obligado a ir muy poco a poco",
reconoce.
Trofeos Pallart, como muchas otras empresas, tiene un duro competidor en
China. "Yo quise trabajar allí con la idea de poder poner mi producto en
cualquier rincón del mundo con los costes chinos. No lo conseguí",
reconoce.
El sistema de trabajo de Pallart está ligado a los centros
penitenciarios. Da trabajo (y se beneficia de unos costes laborales
menores) a presos y personas que están en centros especiales de empleo.
"Fabricamos en las cárceles y luego montamos los trofeos en nues-tras
instalaciones. El otro aspecto clave para crecer es poder servir, en
cualquier punto de Europa, en menos de una semana", relata.
Con este modo de trabajar, Barrientos asegura que han logrado tener los
costes contro-lados y sobrevivir al temporal. "Hemos conseguido pasar la
crisis manteniendo una plan-tilla estable que oscila entre las 50 y 60
personas". Trofeos Pallart ha facturado en 2014 en torno a los nueve
millones de euros. Además, en un año pueden comercializar cerca del
millón de copas y en torno a unos cuatro millones de medallas. Y todo
ello desde Palencia, algo que Barrientos considera una ventaja. "En
general, Castilla-León es una fuente de riqueza humana distinta. Es un
personal muy responsable, nada problemático. Soy castellano de pura cepa
y no he considerado una desventaja estar aquí", dice con orgullo.
Empleo para presos y discapacitados
La economía social, en la que se engloban centros sociales de empleo
como aquellos con los que trabaja Trofeos Pallart, es una prioridad para
el Parlamento Europeo. O, al me-nos, esto es lo que se desprende de una
reciente decisión del órgano de la Unión Euro-pea, del pasado 17 de
diciembre, que sitúa a la economía social como motor de desarro-llo y
crecimiento de la Unión Europea.
En palabras de Juan Antonio Pedreño, presidente de la Confederación
Empresarial Es-pañola de la Economía Social (CEPES) "esta decisión va a
permitir que se mantenga y refuerce la economía social, y que ésta ocupe
un papel primordial dentro de las políticas económicas del Parlamento
Europeo".
En Europa la economía social representa a dos millones de empresas (es
decir, 10% de todas las compañías continentales), que dan trabajo a 14
millones de personas por cuenta ajena (el equivalente a 6,5% de la
población activa en la UE). De ellos, el 70% trabajan en asociaciones
sin ánimo de lucro, el 26% en cooperativas y el 3% en mutuas.
Estas empresas son de todo tipo y tamaño, desde pymes a empresas
internacionales, y están presentes en muchos de los sectores de la
economía.
Para hacerse una idea de lo que supone este sector en la economía
española basta con acudir a los datos que ofrece la CEPES máxima
institución representativa de la econo-mía social en España. La
Confederación agrupa a más de 44.000 empresas que benefi-cian directa o
indirectamente a 2,2 millones de personas y con una facturación en torno
al 10% del PIB (cerca de 151.000 millones de euros). Entre sus asociados
hay cooperati-vas, sociedades laborales, mutualidades, empresas de
inserción, centros especiales de empleo, asociaciones del sector de la
discapacidad o cofradías de pescadores, entre otros.
--
CNT Palencia
C/ Don Pelayo Nº 14, local 6, 34003 PALENCIA
Apertura martes de 17h a 19h
Página web:
http://cnt-ait.net/cntpalencia/
Teléfono : 979 17 03 24
Correo-e:
palencia@cnt-ait.es